martes, 7 de junio de 2011

Preview: Capítulo 9

Hola a toda la gentecilla que se pasa por aquí.Primero que nada,mil perdones por no actualizar el fanfic aún.He estado ocupada con asuntos personales y traduciendo y subtitulando algunos videos.El día de hoy,les traego un pequeño adelanto del próximo capítulo de Maho Neko :) Espero les guste,ojalá pueda acabar de escribir la primera parte antes de que termine el mes n.n


Maho Neko
Segunda Temporada

§ Capítulo 9 §
El pacto y la despedida
Parte 1
La noticia que era la más comentada por los alumnos de segundo nivel sección A, era que Yuki y Makoto eran novios. Era obvio que sólo era cuestión de tiempo para que esto sucediera, después de hablar con Xariot, Makoto me alejó de los demás para darme la buena noticia. Me hizo muy feliz escucharla, cuando me lo contó los ojos de Makoto brillaban de alegría y emoción, su sonrisa era enorme y llena de ternura, podía estar seguro que a los dos les iría muy bien, en verdad me alegraba por la felicidad de ambos.
Era muy tierno ver a la nueva pareja agarrada de la mano en los pasillos de la escuela, compartiendo el almuerzo, abrazándose, y dándose pequeños besos de repente, no parecían querer separarse ni un segundo. Makoto hablaba más con Mizu para pedirle consejos sobre cómo ser un buen novio, este argumentaba que de ninguna manera quería decepcionar a Yuki, Makoto siempre se preocupaba por eso, pero yo no podía imaginar que Yuki se alejara de Makoto por cualquier pelea o desacuerdo que pudieran llegar a tener en su relación, era obvio que los dos se querían demasiado.
Al verlos, de repente venía a mi mente el recuerdo de mis días con Tsubasa, pero de inmediato trataba de reprimirlos, recordar todo eso era lo que menos quería, pues sabía que no era bueno para mí. Sin embargo, también relacionaba el asunto de Makoto y Yuki con otra persona: Yue. Recordaba cómo había cambiado su comportamiento conmigo, y la hermosa manera en que me miraba, podía estar casi seguro que Yue ya no me veía sólo como un amigo, pero si ese era el caso ¿Qué era lo que debía hacer? No tenía ni la menor idea, ¿debía hablar con él sobre eso? ¿Si lo hacía cambiarían las cosas entre nosotros? Me gustaban las cosas como estaban, de ninguna manera quería que por eso Yue y yo fuéramos a distanciarnos, eso me dolería mucho, la sola idea hacía que un nudo de nerviosismo se formara en mi estómago.
“Pero tú sientes lo mismo por él”. Esa idea apareció de repente en mi cabeza de algún lejano lugar ¡De ninguna manera era verdad! Era cierto que quería mucho a Yue, el me había ayudado, me apoyaba siempre y por eso lo apreciaba como un querido compañero, como mi mejor amigo, pero sólo era eso, no había nada más. “Crees que es apuesto y maravilloso”. Seguían molestando esas extrañas ideas, era como si tuviera una pelea con mi propia mente ¿Y quién no lo creía? Si de eso hablábamos, era admiración, Yue es una persona admirable, es muy listo y hábil con los deportes, es buen cocinero, muy culto, elegante, educado, muy entregado, leal, tenaz, maduro, protector, hasta es bueno en los videojuegos también, aguanta mis caprichos, es dulce, y… un momento… ¿es normal encontrarle tantas cosas buenas a alguien? “Es porque te gusta ¿Recuerdas lo que pasó la otra noche? Despertaste de repente, y observaste a Yue mientras dormía por un largo rato, no puedes negarlo, estás loco por Yue”.
— ¡De ninguna manera eso puede ser verdad!
Grité como un maniaco, levantándome de mi asiento con el rostro más rojo que una manzana. Al recobrar la compostura, miré a mí alrededor, y mi vergüenza aumentó al recordar que estaba en la sala de descanso de segundo nivel terminando los deberes. Todos los estudiantes que se encontraban ahí me miraban con sorpresa y confusión, mientras otros se reían en voz baja. Sólo atiné a disculparme torpemente, y volver a mi asiento.
— Aki-chan se comporta tan lindo como siempre.
— Si, nuestro Akari-kun siempre hace ese tipo de cosas distraídas, pero eso lo hace más tierno.
Escuché a lo lejos a Mizu y a Kagami quienes estaban juntos comparando sus apuntes. Al menos era bueno saber que mis amigos no creían que estuviera loco, escuchar eso me hizo sentir más tranquilo, y me sentí infinitamente agradecido de que Yue no estuviera en ese momento conmigo o todo hubiera estado peor. Así eran a menudo las cosas, Yue terminaba sus deberes rápido, mientras yo me distraía siempre hasta por el vuelo de una mosca, haciendo que me costara más tiempo. Cuando eso sucedía, Yue se quedaba conmigo para hacerme compañía e incluso a veces hasta me ayudaba, claro, después de regañarme y recalcar mi falta de atención. Al recordar eso, una pequeña y tierna sonrisa se formó sola en mis labios.
No, no Akari… deja de pensar así, está muy mal… Deja de pensar sólo en Yue.
Me reproché a mi mismo dándome unos golpecitos en la cabeza, pero sólo sirvió por unos cuantos minutos, el idiota de Yue se volvió a colar en mi cabeza mientras acababa los deberes.

0 comentarios: