viernes, 1 de octubre de 2010

Capítulo 14: Regresando al pasado

*Nota: Esta parte es narrada por Hikari*

Dormía plácidamente cuando un sonido me despertó. Me levante con pereza de la cama, sin saber que sucedía. Ya al estar mas despierto, me di cuenta que lo que me había despertado, era una suave y dulce melodía.
-¿Pero que es ese ruido?-Dije frotándome los ojos, y acercándome a la ventana-.Suena como…
Llegué a la ventana de la habitación, y descorrí la cortina lentamente. Al voltear abajo, me encontré con Kyousuke, sentado apaciblemente en el césped, justo debajo de mi ventana, tocando una guitarra acústica mientras entonaba una canción romántica.
-Ay… esto no puede ser…
Dije ya completamente despierto, sintiendo como mis mejillas se enrojecían.
-Hikari… ¿pero que es este ruido?
Mizu se había acercado también a la ventana, sus ojos estaban entrecerrados y se movía con pereza, pero ver a Kyousuke debajo de la ventan le basto para despertar por completo.
-¡Mira eso! Kyousuke te trajo serenata… ¡Pero que lindo!
Grito Mizu emocionado. Este grito hizo que Kyousuke se diera cuenta de que estábamos en la ventana. Al vernos, dejo de tocar de inmediato, y se dirigió a mí gritando para que pudiera escucharlo:
-¡Hey flamita sexy! ¿Te gustó mi canción? Para que veas, el gran Kyo no sólo sabe tocar rock, también tengo guitarras acústicas.
-Basta… ¡esto debe terminar!
Dije decidido, para después salir de la habitación. Me cambie rápidamente y baje del edificio para salir al jardín y encontrarme con Kyousuke.
-Oye Kyousuke…
-Vaya, así que decidiste bajar…
-Escúchame, esto debe parar. No tiene caso que me sigas coqueteando. Kyousuke… estoy enamorado de otra persona.
-¿Enamorado?
Me dijo Kyouske, abriendo mucho los ojos. Yo le respondí apenado, desviando la mirada y bajando las orejas:
-Si, lamento decírtelo así, pero…
-Y esa persona…-Me interrumpió Kyousuke-La que te gusta… ¿te corresponde?
-Ah… no se, no hemos hablado de eso.
-¡Bien! Eso quiere decir, que aun tengo una oportunidad.
Concluyo Kyousuke, mostrándome una enorme sonrisa. Yo me quede parado frente a él, sin saber que contestar.

***

Eran las 10 de la mañana, salí de darme un refrescante baño, y pude ver a Yue frente al espejo de la habitación, cepillando su largo y lacio cabello, mientras bostezaba con pereza.
-¡Vaya, pero que lindo día! -Dije en voz alta, asomándome en la ventana, para comenzar una conversación con él-.No puedo creer que el torneo de duelos ya vaya a terminar. Ya sólo faltan unos cuantos duelos, y hoy es el turno de Ryu y Kagami. Hisui me agrada, y hemos hecho muy buenos amigos aquí. Pero extraño mucho Maho y ya quiero volver… ¿Qué opinas tu Yue?
Le dije, sentándome en una silla cercana a él, moviendo mi cola de lado a lado, sonriéndole dulcemente. Yue me contesto despreocupadamente, mientras cepillaba su esponjada cola, mirándola con atención más de lo necesaria.
-Opino que para ser tan pequeño, hablas mucho.
-¿Qué? ¿No puedes pasar ni cinco segundos sin criticarme? Yue, yo trato de ser amable contigo, ¿Por qué no puedes intentarlo serlo tú conmigo? ¡Ya te dije que quiero ser tu amigo!
-Y yo ya te dije que es mejor que no te acerques a mí, no es bueno que seas mi amigo.
-¿Y por que?-Le contesté, acercándome-.Dame una sola razón por la que no pueda ser tu amigo y te dejare en paz.
Yue guardo silencio por unos segundos, como si estuviera meditando una respuesta y me contestó:
-Eres demasiado bajito para ser mi amigo.
Dicho esto, se dio media vuelta, dispuesto a salir de la habitación.
-¿¡Que clase de razón es esa!?-Comencé a gritarle furioso-¡Ya basta, Yue imbécil!-Tome un cepillo que estaba cerca de mi, y se lo lancé con todas mis fuerzas- ¡Deja de decirme tonterías!
El cepillo se dirigió justo a la cabeza de Yue, pero mire sorprendido como este movió la cabeza a un lado, y lo atrapo ágilmente con su mano. Volteo a verme despreocupadamente, y me dijo sin emoción alguna en su voz:
-¿Qué acaso esta de moda lanzar cosas? (*nota: Se refiere al capitulo pasado =P)
-Deja de tomarme el pelo…
-Está bien, si quieres saber la verdad… Te odio y eres desagradable… Así de simple.
Yue se dispuso a salir de nuevo de la habitación, pero antes de que lo hiciera, hablé en voz baja, pero audible.
-Entonces, si te desagrado tanto… pide otro compañero de equipo.
Para mi sorpresa, Yue se volteo rápidamente, viéndome a los ojos de una manera extraña, su hermoso ojo azul cielo mostraba una mezcla de dolor y furia.
-¡Eso si que no! ¡Nunca!-Gritó, y las siguientes palabras las pronuncio en voz baja, mirando al suelo-: Nunca te cambiaré, Akari.
-No entiendo… ¿Por qué ser compañero de alguien que no te agrada?
Yue me contesto, sin atreverse aun a sostenerme la mirada, este comportamiento era muy raro en él.
-Tus hechizos son muy poderosos, planeo utilizar tus habilidades para obtener más puntos y pasar al siguiente nivel.
-¡Yue imbécil!-Esta vez, fui yo quien desvió la mirada para que Yue no notara el dolor que mis ojos reflejaban en ese momento-.Aunque no lo creas, tu si me simpatizas a mi.
Ninguno de los 2 dijo nada, permanecimos en silencio, hasta que el coraje me gano, y me acerque a él, gritándole:
-¡Pero ahora creo que eres un estúpido! ¡Lárgate, no quiero verte!
-¡Yo tampoco quiero verte, “pequeño engendro de la luz”!
-¿Ah si? ¡Pues mejor para mí! ¡Tarado!
-¡Imbécil!
-¡Insensible!
-¡Gritón!
-¡Hump!
Concluimos los 2 al mismo tiempo. Yue salió de la habitación dando un fuerte portazo. Por mi parte, yo me quede en la habitación, leyendo mis mangas, tratando de distraerme para olvidar el coraje que Yue me había hecho pasar.

***

Media hora después de lo que sucedió, me encontraba caminado por los pasillos de Hisui, no podía sacarme de la cabeza la pelea que había tenido con Yue.
-Yue es tan tonto e insensible.
Pensé, mientras caminaba con fuerza más necesaria a causa del coraje. Al doblar en la esquina de un pasillo, sentí como chocaba con alguien. Cerré los ojos a causa del impacto, y al abrirlos, me sorprendí de encontrarme cara a cara frente a Yue de nuevo.
-¿Qué haces aquí?-le dije enojado-¿Acaso estas siguiéndome?
-Claro que no tonto, ¿Por qué habría de hacerlo? Yo iba a la cafetería.
-¿Eh? … Yo también iba a la cafetería.
Le respondí con ironía, volteando mi rostro.
-… Bueno, supongo que no nos queda mas que ir juntos, ¿oh no?
Me dijo Yue, bajando las orejas y mirándome con recelo, yo le conteste de igual manera.
-Si, supongo… seguimos el mismo camino.

***

No entendía esa extraña fuerza que me hacía querer quedarme con Akari, sin embargo, ahí estábamos los 2, comiendo tranquilamente en la cafetería en la misma mesa. Por increíble que pareciera, cada día que pasaba, los 2 encontrábamos más temas de conversación, y el silencio que reinaba entre ambos cuando estábamos a solas, cada vez iba desapareciendo más.
Debía estar feliz con eso, pero al contrario, eso me preocupaba ¿Realmente el motivo de no querer cambiarlo era por su poderosa magia o era algo mas? Algo en mi interior me indicaba que había algo más, una razón más poderosa que esa, pero no podía entender cual era.
-Mamá… ¿Qué puedo hacer?
Comencé a hablar con mi difunta y querida madre en mi mente, mientras Akari y yo continuábamos comiendo, aunque sabía que no me iba a contestar, conversar con ella de esta forma siempre me tranquilizaba cuando estaba asustado o triste.
-Le agrado a Akari, él me lo dijo. Creí que jamás le agradaría a nadie de nuevo. Con Akari me divierto mucho, él también me agrada, es algo que no puedo negar ¿Debo quitar mi escudo con él? ¿Mostrarme como realmente soy? ¿Aceptar su amistad? Ya no soporto esta soledad con la que tanto tiempo he cargado, pero… Mamá, dime que debo hacer.
Continué pensando, mientras sostenía mi parche con mi mano derecha.

***

-¿Y no piensas decirme la razón de por que estabas tan callado los últimos días?
Le pregunte a Yue mientras caminábamos por los jardines de Hisui rumbo a la arena de duelos.
-Ya nos pedimos disculpas por gritarnos, confórmate con eso.
-Siempre lo mismo.
Dije suspirando derrotado. De repente, escuchamos una voz a lo lejos.
-¡Yue-san!
Alguien llamaba a Yue, a unos metros de nosotros, y corriendo muy emocionada, estaba una chica muy linda. Era bajita y delgada, incluso mas baja que yo, su cabello era de un color rosa pálido, lo llevaba suelto y lo tenía corto, a la mitad de la espalda. Sus ojos eran muy dulces y grandes, de color rojo sangre.
-No es posible… ¿Ko-chan?
Dijo Yue al ver como la chica se detenía delante de él.
-¡Si, así es, soy yo!
Le respondió la chica mostrándole una gran y cariñosa sonrisa a Yue.
Ante mi sorpresa, Yue le sonrío, fue la primera vez que vi a Yue sonreír de una manera dulce y sincera, acto seguido, abrazo a la chica con ternura y le dijo:
-Que gusto verte de nuevo… ¡Cuánto tiempo ha pasado!
Yo no podía darle crédito a mis ojos, entonces vi a un chico acercándose hacia nosotros. Llevaba sus ojos tapados por una especie de capucha, sólo se podían ver su nariz y boca, pintada en su mejilla derecha, estaba el dibujo de una espiral de diferentes colores. Su cabello era de un rojo profundo, y le llegaba a mitad de la espalda, también lo traía suelto. Algo raro es que traía cargando un animal pequeño, parecía un perro, este animalito tenia el pelo muy brillante, una gema color roja en su frente, al igual que marcas en su cuerpo del mismo color.
-Kotori-chan, corriste muy rápido.
Dijo el chico parándose al lado de Kotori.
-Gami-kun, lo siento.
Le contesto la chica sonriendo. El animalito saltó del regazo de Gami a Kotori, y comenzó a lamerle la cara muy feliz.
-¡Goruru, basta, me haces cosquillas!
Dijo Kotori entre risas.
-Vaya, Goruru si que ha crecido mucho.
Dijo Yue mirando a la chica con su mascota, Kotori le contesto con ternura.
-Si… ¡Cierto! Yue-san, él es mi compañero de equipo, Gami-kun.
-Mucho gusto.
Dijo Gami en tono educado, inclinando un poco la cabeza, Yue le contesto de igual manera.
-Ah… igualmente, un placer.
Yue recordó que yo también estaba ahí, y dijo sin emoción en la voz:
-Ah… yo les presento al mío, él es Akari.
-Mucho gusto.
-Hola.
Dijeron Kotori y Gami en ese orden. Yo les respondí, mostrándoles una enorme sonrisa.
-Igualmente, que gusto conocerlos.
-Akari-kun, tu rostro si que es hermoso y delicado.-Me dijo Gami, con emoción en la voz-.En verdad me inspira, ¿me dejarías pintarlo?
-¿Eh? ¿Cómo que pintarlo?-Le dije, un tanto nervioso y asustado-¿Quieres rayarme la cara?
Gami soltó una sonora carcajada, mientras Kotori me dijo sonriendo:
-No, estas confundido Akari-san. Gami-kun es pintor, deberías ver los cuadros que hace, son hermosos.
-Ah… ya veo.
Le conteste, ahora un poco apenado.
-Así que Kotori-chan,-dijo Gami, volteando a ver a Kotori-¿él es el Yue-san del que tanto me hablabas?
-¿Qué? Gami-kun, no digas eso.-Le contestó Kotori sonrojándose-. ¡Sólo bromea! ¡Ja, ja, ja!
-Sin embargo Ko-chan,-dijo Yue volviendo a su mirada calmada de siempre-me sorprendió encontrarte en Hisui.
-Bueno, mis padres decidieron que entrara aquí por el prestigio de la escuela. Pero Yue-san… yo te hago la misma pregunta, ¿Por qué estas en Maho? … ¿Por qué ahora?
Yue bajo la vista y guardo silencio por unos segundos, acto seguido tomo la mano de Kotori, y le dijo:
-Ven, tenemos que hablar en privado.
Kotori miro a Yue con un poco de sorpresa, parecía salir de una especie de sueño cuando se acerco a Gami, tendiéndole a su mascota y le decía amablemente:
-Gami-kun, por favor, cuida a Goruru en lo que regreso.
-Claro.
Dijo Gami tomando a Goruru y colocándoselo en el hombro.
Kotori y Yue comenzaron a caminar uno junto al otro, antes de que se alejaran, le hable a Yue.
-Ah… ¡Yue, espera! ¿A dónde vas? El duelo de Ryu y Kagami no tarda en empezar.
-… Platícame después como estuvo,-me contesto Yue mirándome de reojo-, nos vemos en un rato más.
No podía dejar de sentirme sorprendido al ver como Yue y Kotori se alejaban juntos, jamás creí que llegaría a conocer a alguien que tuviera esa cercanía con Yue.
Volví a la realidad, cuando escuche la voz de Gami junto a mí.
-A mi también me gustan los duelos, ¿puedo ir contigo?
-Gami-kun… ¡Si, gracias!
Le conteste sonriéndole dulcemente.

***

Kotori me llevo a uno de los jardines de Hisui, no se veía nadie a los alrededores, y era justo lo que necesitaba, que nadie escuchara todo lo que estaba a punto de contarle, ya que Kotori era la única persona en el mundo, además de mi familia, que sabía todo sobre mí.
-Mi búsqueda de librarme de la maldición, me llevo a Maho. Después de todo, recordé el prestigio de la escuela, por que Xei-ran estudió ahí.
-Es cierto,-me contesto Kotori con seriedad-, tu hermano se gradúo de Maho.
-Xariot-sensei se porto muy amable conmigo por aceptarme en Maho. Además, él y mi padre eran buenos amigos. Xariot me dijo que de momento, él no conocía la manera de ayudarme, pero me dijo que en lo que yo estudiaba en Maho, buscaría la manera de librarme de la maldición. Además, necesito ser fuerte, incrementando mis poderes es la única manera en que podré controlar a esto que yace en mi interior, no hay otra forma.
-Así que Yue-san, en el viaje que empezaste… ¿no lograste encontrar ningún método que te liberara?
Mire a Kotori por un momento, sus ojos carmesí estaban entrecerrados, muy tristes. No soportaba verla así, y menos por mi culpa, odiaba preocupar a Kotori, pero sólo con ella me permitía desahogar mi dolor.
-No, ningún método me ayudo, y… tampoco pude encontrarlo a él.
-¿Hablas de Xei-ran?
-Así es…-Esta vez, yo fui quien me sentía triste, el solo recordar la traición de mi hermano mayor me hacía sentir como si estrujaran mi corazón por dentro.-Es como si se hubiera desvanecido de este mundo.
-Yue-san…-Dijo Kotori en voz baja, mirando hacia el suelo, no podía ver su rostro, pero la conocía tan bien como para adivinar que estaba reprimiendo las ganas de llorar-.Dime, ¿Por qué no aceptaste la propuesta que te hice? ¿No crees que hubiera sido mejor? Mi clan tal vez no podía ayudarte a librarte de la maldición, pero todos tienen muchos conocimientos. A pesar de mis súplicas, tú decidiste seguir tu camino, completamente solo, aunque tenías tan sólo 11 años de edad.-Kotori finalmente volvió su mirada hacia mi, fines y cristalinas gotas se resbalaban por sus mejillas, cayendo sin cesar en la falda de su uniforme-.No podía imaginar como estabas viviendo tu solo ese martirio, como soportarías sin ayuda de nadie todo lo que tu corazón había sufrido a causa de la muerte de tu madre y la traición de tu hermano. No soportaba el dolor de que te hubieras marchado lejos a encontrar una solución tu solo, junto a ese… ese… ese horrible demonio encerrado en tu interior.
Kotori cerró los ojos en vano, tratando de controlar su llanto. Me acerque hasta ella, y le seque las lágrimas con el dorso de la mano, sonriéndole con cariño.
-Ko-chan, si me quedaba en el clan Ainu, en tu clan, iba a poner a todos ellos en peligro. De ninguna manera podía permitirme poner a toda tu familia y a tu clan en peligro por mi culpa, por eso es que me fui, por favor entiende que es algo que debo arreglar yo solo. No quiero que vuelva a repetirse lo que sucedió en mi clan, no quiero ser yo la causa de la destrucción de tu clan, jamás me atrevería a ponerte en tal riesgo Ko-chan.
El llanto de Kotori finalmente paro, me dedico una pequeña sonrisa por unos segundos, para después hablar seriamente de nuevo:
-Está bien, Yue-san, lo entiendo, discúlpame por llorar así. Pero, dime… ¿Qué ha pasado? ¿Ese demonio se ha seguido liberando?
-Hace unos meses que no ocurre nada, afortunadamente cuando llegue a Maho, Xariot-sensei logro ponerle un sello para que no pudiera liberarse, pero me advirtió que su magia no era lo suficientemente fuerte para contenerlo para siempre, por lo que conforme pasara el tiempo, el sello iría perdiendo su efecto. Y eso es verdad, cada vez mas, puedo volver a oírlo en mi mente, cada vez con mas fuerza, mas cerca… En una ocasión, estuvo a punto de liberarse, pero pude controlarlo gracias a mi magia.
-Yue-san…
Dijo Kotori volviendo a entristecerse, yo le sonreí con seguridad al contestarle.
-Descuida Ko-chan, nada me detendrá para lograrlo, se que lograré librarme de esto, se que algún día, mi clan volverá a la vida, yo levantare a mi clan, haré todo lo que sea necesario para lograrlo.
-Yue-san,-me respondió Kotori, sonriéndome con timidez-, no has cambiado nada, aún eres esa persona que tanto admiro, la cual nunca se da por vencida y siempre lucha por lo que quiere, me alegra.
La sonrisa desapareció de mi rostro, al recordar todo lo que había pasado desde aquel terrible incidente. Lentamente, apoye mi cabeza en el hombro de Kotori, escondiendo mi rostro en su brillante y rosado cabello.
-Dime, Ko-chan… ¿crees que hago mal en seguir buscando a mi hermano? Si lo busco, no es por querer matarlo, ni cobrar venganza… Deseo verlo, verlo y preguntarle por que lo hizo… preguntarle por que encerró a este demonio en mi interior, y por que, asesino a nuestro padre. …l debe saberlo Ko-chan, él debe saber como sacar a este ser infernal de mi interior. Ko-chan, a pesar de lo que hizo, no puedo odiarlo, no puedo…
Yue-san, te entiendo…-Me contesto Kotori, abrazándome con ternura para consolarme-.…l sigue siendo lo único que te queda en este mundo, sigue siendo tu muy querido y admirado hermano Xei-ran, yo te comprendo, y mucho menos me atrevo a juzgarte. Yue-san, yo lo se, debe haber alguna explicación del comportamiento de Xei-ran.
-Ko-chan… Antes de morir, mi madre me lo dijo… Me dijo que buscará un motivo por el cual ser feliz, un motivo que me hiciera querer seguir viviendo día a día, a pesar de las dificultades. Aún no encuentro mi motivo para ser feliz, Ko-chan… ¿crees que algún día llegue a encontrarlo?
-… Claro que si, Yue-san, se que lo encontraras, confío y espero en que lograrás encontrarlo.
No le respondí nada, apreté mi mandíbula y mis manos con fuerza para no dejar escapar el llanto de mis ojos, Kotori debió notarlo pues me dijo:
-Yue-san, por favor, no sigas conteniendo esas lágrimas, sabes que estas en total confianza conmigo, no has llorado desde el funeral de tu madre… ¿cierto?
-Jamás,-le dije volviendo a hablar con tono frío-, nunca voy a llorar enfrente de nadie, primero muerto.
-También sigues siendo igual de orgulloso.
Respondió Kotori con tono burlón.

***

-Entonces… ¿Kotori y Yue son amigos de la infancia?
Le pregunte a Gami, cuando ya estábamos sentados en las gradas esperando a que empezara el duelo.
-Así es, el clan Ainu, el clan al que pertenece Kotori, están establecidos en el territorio vecino al clan de Dasarev. No sólo eso, debido a las guerras y las invasiones de otros clanes, muchas veces se vieron obligados a trabajar juntos, por eso estos 2 clanes siempre convivieron en paz y armonía.
-Ya veo, así que se conocen desde hace mucho tiempo, a decir verdad, es la primera vez que veo a Yue tan cercano a una persona, ahora entiendo el por que.
Gami y yo nos quedamos callados por un momento, hasta que Gami volvió a hablar, mostrándome una pequeña sonrisa.
-Ahora lo entiendo… Akari-kun, tu deseas llevarte bien con Yue, pero no sabes como ¿cierto?
-¿Qué?-Respondí muy sorprendido-.Pero Gami-kun… ¿Cómo es que sabes eso?
-No me menosprecies, no podría llamarme a mi mismo artista, si no pudiera comprender los sentimientos y los deseos de la gente con tan solo mirarlos ¿no crees?
-¡Guau! ¡Eres sorpréndete Gami-kun!
-No es para tanto.
Me contesto Gami con modestia, sin embargo, al recordar lo que este me dijo, continúe hablando un tanto decepcionado, bajando las orejas.
-Pero tienes razón Gami-kun, deseo llevarme bien con él, además de que es mi compañero de equipo. Yue me contó por lo que paso… Lo de la muerte de su madre, y que su propio hermano asesino a su padre. Entiendo por que es tan frío y cerrado con las personas, y yo se que aunque es tan cruel, él es una persona muy amable y noble en el fondo. Se lo solo que debe sentirse, por eso, yo quiero ser su amigo… no quiero dejarlo solo, pero no logro atravesar esa barrera, y no se si algún día lo lograre…
-Akari-kun-me interrumpió Gami, sin dejar de sonreír,-tú eres un chico muy amable y dulce, gracias a eso, se que lograras romper ese escudo de Yue, así que no te des por vencido.
Gami era un chico muy maduro, sincero y amable. No pude más que sonreírle y darle las gracias por su consejo.
-Debe ser bonito tener una amistad que halla durado durante tanto tiempo.
Le comente a Gami, viendo como la arena de duelos comenzaba a llenarse de mas publico.
-Si, aunque… Pienso que Kotori siente algo mas por Yue, creo que no siente sólo amistad por él.
-¿Eh? ¿Crees que Kotori está enamorada de Yue?
-Es muy posible,-me respondió Gami encogiéndose de hombros-, Kotori es una chica muy predecible, bueno, al menos, para las personas que la conocen bien.
-Enamorada… Bueno, después de todo, Yue tiene muchos admiradores en nuestra escuela… pero Kotori es diferente, es su amiga…
Gami no dijo nada, voltee a verlo, y vi que su rostro ahora lucía algo sombrío. Pensé que este tema tal vez le incomodaba, así que decidí comenzar a hablar de otra cosa.
-Y dime Gami-kun… ¿a que clan perteneces?
-¿Yo? Soy del clan Hathor.
-¿¡Del clan Hathor!? ¿De veras? ¿Estas en el mismo clan que Senryo y Kyousuke?
-Así es.
Me contesto Gami riéndose en voz baja ante mi rostro lleno de sorpresa.
-¿Entonces tu también usas la música como arma?
-No. En el clan Hathor veneramos las artes Akari-kun. En otras palabras, utilizamos cualquier clase de arte en las peleas.
-¡Que interesante!-Le conteste sonriéndole con emoción-¿Qué arte usas tu, Gami-kun? ¿Acaso tiene que ver con la pintura?
-Así es, todo lo que pinto cobra vida. También utilizo mis pinceles y tinta como ataque.
-¡Sorprendente!-No pare de decir, ya que nunca había conocido a nadie con tales habilidades-¿Me podrías mostrar algo?
-Claro.
Gami saco un cuaderno de un estuche que tenía colgado en la espalda, y comenzó a dibujar una hermosa mariposa de diferentes colores. Una vez termino el dibujo, concentro su magia en el dibujo, y ante mi mirada atónita, la mariposa cobro vida, levanto el vuelo y desapareció tras los árboles de los jardines de Hisui.
-Que hermosa…
Dije con tono relajado, viendo como la mariposa se perdía ante nuestra vista.
-Si, lastima que no vivirá mucho. Mis dibujos solo viven por cierta cantidad de tiempo, entre mas grandes sean los dibujos, vivirán menos.
Nuestra conversación termino al ver como Yatsu y Yaratsu-sensei se acercaban a la arena de duelos.

***

Kotori y yo nos dirigíamos a la arena de duelos una vez terminamos de charlar. Sin embargo, nos dimos cuenta que el duelo ya había terminado pues todos los alumnos caminaban hacia diferentes direcciones, saliendo de la arena.
Vimos cerca de nosotros a Akari y a Gami, junto con los demás alumnos de Maho, como era de esperarse de la personalidad social y amigable de Akari, este se había dado a la tarea de presentarles a Gami a los demás chicos. Conforme nos acercábamos a ellos, oíamos más de su conversación.
-No puedo creer que la pintura que esta en mi sala sea tuya, Gami-kun.-Exclamo Karasi con mucha admiración-.En verdad tus cuadros son hermosos.
-Gracias,-le respondió Gami con voz tranquila-, pintar es mi estilo de vida, y no hay nada mas gratificante para mi el que la gente disfrute de mis pinturas tanto como yo.
-El duelo fue muy interesante,-escuchábamos ahora la voz de Yuki-, es una lástima que Maho halla perdido esta vez.
-Si, -le respondió Mizu-, será mejor que en un rato más vayamos a visitar a Ryu y a Kagami a la enfermería.
Todos se percataron de nuestra presencia, mientras Gami saludaba alegremente a Kotori, yo como siempre, sentía las miradas llenas de odio y rencor de Hikari y de Yuki, pero esta vez, me sorprendió la manera en que Akari me miraba. Esta vez, sus ojos reflejaban tristeza, una mezcla de tristeza y de decepción, esto me intrigo tanto al verlo, que no pude sacarme de la cabeza la mirada de Akari en todo lo que resto de ese día.

***

Al día siguiente, esperábamos pacientes a que nos dijeran quienes se enfrentarían en los próximos duelos. Yue y yo estábamos en silencio, cuando escuche su voz de repente:
-Oye… “pequeño engendro de la luz”…
-¿Qué quieres ahora?
Le dije levantando mis orejas instintivamente en señal de alarma, creía que Yue querría discutir o molestarme como de costumbre.
-¿Todo esta bien contigo?
-¿Eh? ¿A que te refieres?
-Tú sabes…-Me dijo Yue volteando un poco su rostro, mientras que su fleco le tapaba gran parte de su rostro-, ayer no estabas saltando ni gritando las tonterías que normalmente gritas, si no que estabas demasiado quieto…
-…
-Por eso te pregunto si todo está bien….
No podía creer esto, Yue en verdad se había dado cuenta que ayer me había sentido un tanto decepcionado de no poder llevarme bien con él, a diferencia de cómo él se comportaba con Kotori. En otras palabras, él estaba preocupado por mi.
-Mmmh… no, -le respondí sonriéndole dulcemente-, no tengo nada malo, estoy bien, creo que te imaginas cosas Yue… pero muchas gracias por preocuparte por mi.
-¿¡Que!?-Respondió este alzando las orejas, con las mejillas levemente sonrojadas-¡No seas tonto! Yo no estoy preocupado por ti.
-¿Ah no?-Le dije con una sonrisa irónica,-¿entonces como le llamas a esto?
-Sólo es curiosidad.
-¡Ja, ja, ja! ¡Si, claro! ¡Yue se preocupo, se preocupo, se preocupo!
Le dije cantando, picándole el brazo juguetonamente.
-Ya te dije que no inútil, eres demasiado atolondrado para entender cualquier cosa.
Me dijo Yue dándome un garnucho en la frente para detenerme.
-¡Nyaaaa! –Maúlle muy enfadado-¿¡Quien te crees, Yue inútil!? ¡No me golpees!
Justo estuve a punto de agarrar sus orejas para jalárselas, cuando vi como Yue miraba con atención la pantalla y decía en voz baja:
-Ko-chan…
De inmediato voltee, y me sorprendí de ver el resultado del sorteo. A Kotori y a Gami les tocaba enfrentarse contra Yuki y Makoto en el próximo duelo.

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