jueves, 18 de febrero de 2010

Capítulo 1: Una nueva vida

§ Capítulo 1 §

El carruaje tirado por el enorme dragón color plata se deslizaba lentamente por el hermoso cielo azul. Podía observar las nubes alrededor del carruaje por la ventana, no podía concentrarme, me sentía nervioso.
Aunque no lo deseaba, el recuerdo de mi madre enferma, convaleciente en cama, llegaba en mi cabeza. Mi padre había muerto cuando yo tenía tan sólo 10 años de edad, con el tiempo, por alguna razón extraña, mi madre enfermo. Ni los mas poderosos "halfs" expertos en curaciones pudieron hacer algo por ella, es por eso que yo decidí salir de mi hogar natal "Urem" ahora que ya he cumplido 16 años.
Escuche que la escuela Maho de magia y hechicería  era de las mejores, es la única opción cerca de mi madre, ya que pienso volverme fuerte, quiero ser un poderoso hechicero y encontrar la cura para salvarla. Ella me sonrío cuando partí, la abuela me prometió que la cuidaría mucho, y yo, con mis ojos llenos de lágrimas, tan sólo pude prometerle que me volvería fuerte para salvarla. No quiero, nada me duele mas que alejarme de mi familia, pero se que es necesario.
Ayer llegue a "Lagarem" y hoy me dirijo a la escuela Maho. Sin embargo, una voz que me llamo por mi nombre me saco de mi cabeza. La alegre señorita, que me había dicho que se llamaba Mariett estaba sentada a mi lado. Ella fue a recogerme al hotel ayer, me dijo que era la encargada de alumnos de intercambio de la escuela Maho, por eso ahora me acompañaba en el carruaje volador. Me hablo con un tono dulce y educado:
-Akari-kun, no se preocupe, la escuela Maho es una gran escuela de magia y hechicería. Le aseguro que le gustara.
Ella me sonrío dulcemente, y yo no pude más que devolverle la sonrisa.
-Si, muchas gracias.
Me voltee de nuevo a mirar las nubes, preguntándome como iba a ser mi vida a partir de ese momento.
*** 
En efecto como me comentaron, la escuela Maho era muy grande y elegante, con grandes salones, explanadas y muchos edificios. No había problema por mi hospedaje en "Lagarem", ya que la escuela era un internado, iba a tener mi propia habitación en la escuela, y estudiar al mismo tiempo.
Mariett me condujo hasta la oficina del director, tras esperar unos minutos, él pudo atenderme. El director era un "half" muy imponente, su cabello era largo, hasta la mitad de la espalda de color azul marino. Sus ojos eran negros y mostraba un semblante muy serio. Se presento con el nombre de Xariot. Así que el hechicero Xariot, pensé, incluso en "Karem" había escuchado muchos relatos maravillosos de él, no me sorprendía ahora que fuera el director de Maho, y esta tuviera tan buena reputación.
Me dijo que yo estaría en la clase de primer nivel, en la sección "A", también me comento que en la escuela, en total, había 3 niveles. El de novatos, intermedios y el superior. Me dijo que tal vez tendría un poco de problemas para acoplarme ya que las clases ya habían comenzado hace un mes, pero yo le conteste que no importaba, que me sentía agradecido por que me hubiera aceptado. Sólo me miro fijamente (una mirada que me dio algo de miedo) y me entrego una hoja, diciéndome que ese era mi horario de clases. Después de darle las gracias una vez mas, salí de su oficina pues Mariett me diría cual iba a ser mi habitación. Una vez me condujo hasta ella, los 2 nos despedimos sonriendo y entré en la habitación.
El viaje había sido largo y agotador, pero prefería desempacar de una vez. Inspeccione mi habitación, tenia un baño, una cocina con su comedor, y una habitación con 2 camas... ¿2 camas? ¿Acaso iba a compartir mi habitación con alguien más? Bueno, eso la verdad, no me importaba mucho, el lugar era cómodo para 2 personas, tenia que admitirlo.
Tras desempacar todo, decidí que lo mejor era dormir, pues mañana sería mi primer día de clases y no quería despertarme tarde. Puse el despertador con figuras de osito que me había regalado mi abuela (si, soy algo infantil, no puedo evitarlo) con la hora necesaria ya programada,  en la mesita al lado de mi cama, junto al horario de clases, pues no quería perderlo. Aun con los nervios que sentía, logre dormirme rápida y profundamente.
***
Todo iba bien al día siguiente, me levante, me bañe, desayune y me prepare para ir a la escuela. Pero tras revisar mi mesita descubrí que algo faltaba...
-¡El maldito horario de clases! Comencé a gritar en voz alta-¿¡Ahora que haré sin él?! ¿A dónde se supone que iré? ¡Soy nuevo y ni conozco los salones! 
Mire el reloj, faltaban 10 minutos para que las clases comenzaran. Me maldije a mi mismo por mi pereza y despreocupación en situaciones tan críticas como esas, si era algo que me costaba mucho en las mañanas, era levantarme temprano, yo adoro dormir, por eso siempre ando con prisas. Pensé de nuevo que hacer, pues si me quedaba en mi cuarto, perdería mas tiempo buscando el dichoso papel, y fue cuando me percate que el atolondrado de mi, había dejado la ventana abierta en la noche, y lo mas probable es que ahora el horario estuviera muy lejos, volando libremente por el cielo.
-Es caso perdido.-Pensé-.
Decidí salir de mi habitación y dirigirme a los salones de clases, y cualquiera que fuera el estudiante que encontrara en el camino, le preguntaría por la clase que me tocaba a primera hora. De haber sabido lo que me esperaba mas adelante, hubiera cambiado de plan, en ese momento... ¿Cómo no se me ocurrió buscar a Mariett?
Me dirigí a los salones, pasando por una enorme explanada con un hermoso jardín y enormes y frondosos árboles. Fue entonces cuando lo vi a él, sentado tranquila y apaciblemente bajo la sombra de un enorme árbol, aun creo que fue una jugada del destino encontrarlo precisamente a él y no a cualquier otra persona. Lo mire en silencio mientras me acercaba, de seguro él sintió mi mirada, pues también volteo a verme.
Al ver su aspecto me sorprendí, era un chico alto y esbelto, no flaquito y pequeño como lo era yo. Aun me apena admitirlo, pero en ese momento pensé que era atractivo, su cabello era muy largo, le llegaba a la cintura pero lo sujetaba en una coleta. Su cabello, al igual que sus orejas eran de un hermoso color plateado, su cola era hermosa y esponjada, también de color plateado, pero con una graciosa línea en medio alrededor de esta, de color café, me recordaba un poco a la de un mapache. Tenía su ojo izquierdo cubierto por un parche de color negro, y su ojo bueno era de un hermoso color azul cielo.
Me acerque a él un poco temeroso, preguntándome si en verdad un alumno podía tener ese increíble aspecto, pero debía serlo, ya que usaba el uniforme.
-Ah... disculpa...-Le hable en voz baja, con un poco de timidez-. ¿Tú eres de primero?
El chico me vio sin darme importancia, y en voz baja me contesto que si.
-¡Que bien!-Le conteste perdiendo mi timidez-. ¿Podrías decirme que clase le toca a 1°A?
El chico me miro ahora interesado, levantado las orejas, después me contesto, mostrándome una gran sonrisa.
-Le toca la clase de pociones.
Le agradecí sonriéndole amablemente, y me despedí de él con la mano. Tras unos minutos, logre encontrar el salón de pociones, pedí permiso para entrar y el profesor me abrió, los alumnos se me quedaron viendo, interesados, al entrar.
-Ah... buenos días sensei.
El maestro me contestó.
-Ah... tú eres el chico nuevo ¿oh no?
-Si, así es.
Tras mostrarme una mirada llena de confusión, el sensei me miro a través del monóculo de su ojo izquierdo y agrego:
-¿Pero que no eres de la clase A? Esta es la clase B, a ti te toca "hechizos".
Ambos guardamos silencio, mientras yo sentía como mis mejillas se sonrojaban a causa de la vergüenza. Salí corriendo, pidiendo disculpas y cerré la puerta del salón tras de mi. ¡Ese chico idiota me jugo una broma! ¡Si lo volvía a ver, me jure a mi mismo que le patearía el trasero!
Llegue al salón de "hechizos", y cual no sería mi sorpresa al ver a través de las ventanas, el mismo chico peli-blanco que me había jugado esa mala broma. Sin preocuparme de nada más, abrí la puerta enojado y le grite.
-¡Oye tú!
Todos los alumnos, incluido el profesor, voltearon a verme asustados, el chico se me quedo mirando, un poco sorprendido. Me le acerque rápidamente y no podía dejar de gritar.
-¡Me engañaste! ¡¡Y por culpa de eso todos se rieron de mí!! ¿¡Como te atreviste?!
El chico no me dijo nada, me miro con cara de aburrición, y podría jurarlo, un poco de molestia. Entonces el profesor comenzó a hablar atrás de mí.
-Chicos, al fin esta aquí el chico nuevo ¡Saluden todos a Akari-kun!
Concluyo este muy alegre, los alumnos nos miraban a mí, y al chico parchado sin saber que decir. Fui yo quien rompió el silencio, volviendo a hablar con dureza, pero ya sin gritar.
-¿Por qué lo hiciste?
Me sorprendió ver como su cara me mostraba una sonrisa llena de frialdad al contestarme.
-Nunca me pediste que fuera sincero, además de todo... es divertido ver como sufren los demás.
Sentí que era capaz de golpearlo en ese instante, pero el profesor hablo, dirigiéndose a mí.
-Akari-kun, por favor, pasa a tu asiento, es el de aquí.
Vi el asiento que me señalo con su mano, y le conteste, dirigiéndole una última mirada llena de odio al chico del parche.
-Si, sensei.
…l chico del parche, por su parte, me dirigió una mirada llena de rencor.
-¡Que sujeto tan desagradable!, pensé.
Pero antes de seguir quejándome en mis pensamientos, alguien menciono mi nombre a mi lado. Al voltear, me encontré con la sonrisa cálida de un chico muy lindo. Su cabello y orejas eran color café oscuro, sus ojos eran de color verde jade, tenía una marca larga y roja en su mejilla derecha, muchos "halfs" suelen llevar marcas en sus rostros para reconocer el clan o a la familia a la que pertenecen. La cola del chico era café, pero con manchas negras por toda esta, como la de un leopardo.
-Hola Akari-kun, mucho gusto. Mi nombre es Makoto, bienvenido.
-Muchas gracias, igualmente.
Le conteste devolviéndole la sonrisa. Makoto y yo comenzamos a hablar:
-Me especializo en la tierra, ¿y tú?
-La luz
-¡Vaya, que interesante! Eres el único de nuestra clase que se especializa en la luz
-¿En serio?-Le conteste un poco apenado-No es para tanto.
Por instinto, voltee a mi derecha, y vi al chico del parche sentado apaciblemente en su lugar, oyendo la clase, pero con una clara muestra de aburrimiento en su rostro. Al verlo, no pude evitar que el enojo volviera a mi, Makoto debió notar esto, por que continuo su charla, mostrándose algo preocupado.
-Veo que ya tuviste problemas con Yue-san
-¿El nombre de ese chico es Yue?
-Si, es un chico muy extraño y peculiar, la verdad, muchos aquí le temen. Es de los pocos alumnos que se especializan en la oscuridad, es raro que esa clase de alumnos estudie aquí, ya que en "Lagarem" hay una escuela que se especializa sólo en la oscuridad, se llama "Gaaram". Es extraño que él halla decidió entrar a Maho, y no a Gaaram. Además con ese parche (agrego Makoto un poco asustado) nadie explica como perdió el ojo.
Estaba a punto de contarle como Yue me había engañado en la mañana, cuando el profesor nos vio a los 2 un poco molesto, por lo que tuvimos que dejar nuestra charla para después, no quería causar mala impresión en mi primer día de clases.
La campana sonó, anunciando el término de las clases, Makoto me dijo que él sería mi guía el día de hoy para enseñarme toda la escuela. Makoto era muy agradable, al parecer, había hecho mi primer amigo. Ambos nos dirigimos juntos al salón de la siguiente clase, que era la de "estudios mágicos". Íbamos charlando cuando escuchamos una voz atrás de nosotros.
-Sigues igual de lento que siempre Makoto.
Makoto maulló en voz baja, al voltear, vi un chico sonriendo pícaramente, y jalando la cola de Makoto. Makoto le contesto, un poco molesto y avergonzado.
-¡Yuki! ¡Te he dicho que no hagas eso!
-Lo siento.
Contesto Yuki sonriendo. Yuki era un chico muy atractivo, su cabello y orejas eran rubios, el cabello lo llevaba largo, sujetado en una coleta, con 2 graciosos mechones sueltos y pegados a sus mejillas. Sus ojos eran de color azul cielo, y por segunda vez, veía una cola esponjada y elegante, de color rubio también. Yuki volteo a verme, y me sonrío.
-Ah, tú eres el nuevo, Akari-kun ¿oh no?
-Así es, mucho gusto.
Le conteste sonriéndole. Yuki se acerco a mí, y me tomo cariñosamente las manos.
-El gusto es mío, me llamo Yuki, para servirte.
Después dicho esto, Yuki me dio un beso en la mano, haciendo que me sonrojara.
-Eres muy lindo Akari-kun, hermoso... debería decir.
-Ah... gra... ¿gracias?
Le conteste un tanto confundido, mientras Yuki sonreía divertido ante mi reacción. Makoto vio a Yuki con desaprobación y agrego.
-Descuida, él siempre se comporta así.
Yuki se acerco a Makoto esta vez, y tomo sus manos, justo como había hecho conmigo antes.
-Tú eres el único en mi corazón Makoto.
Makoto soltó las manos de Yuki, enfadado.
-¡Ya basta Yuki!
-Ustedes 2 son muy buenos amigos ¿cierto?
Les dije, mirándolos divertido.
-Si, los 2 somos compañeros de equipo. Agrego Makoto.
-¿Compañeros de equipo?
Los 2 asintieron, y Makoto comenzó a darme una explicación.
-Te lo asignan el primer día de clases, será muy importante en tus estudios. Debes pasar muchas pruebas y ganar duelos mágicos con él. Su desempeño juntos les dará puntos. Yuki continúo explicándome.
-Si juntan 200 puntos, ambos pasaran al siguiente nivel. En total son 3 niveles.
-Ya veo-les conteste-¿Cuántos puntos llevan ustedes?
-Sólo 10, Makoto hace todo mal.
Dijo Yuki volteando a ver a Makoto un poco molesto.
-¡No es cierto!
Le respondió Makoto con las mejillas sonrojadas. De repente, vimos como Yue paso a nuestro lado, como si ni siquiera existiéramos.
-Yue... Dije yo con molestia en mi voz.
-Ese chico no me agrada nada.
Dijo Yuki viendo como Yue se alejaba de nosotros.
-Si, dicen que es tan cruel, frío y poco cooperativo, que ya cambio 3 veces de compañero. Nadie resiste ser su compañero.
Yo escuche a Makoto en silencio, no me extrañaba nada lo que acababa de decir.
***
Al día siguiente, la clase de la primera hora, en esta ocasión, si era pociones. Makoto me había hecho el favor de pasarme el horario el día anterior. Uyi-sensei, el profesor de pociones, se acerco a mí, y comenzó a hablarme.
-Akari-kun, tal vez tus compañeros ya te hablaron de que debes tener un compañero de equipo.
-Si, ya lo hicieron.
-Bien, hoy te asignaremos a tu compañero. Veamos, ya que todos ya tienen a su compañero de equipo -dijo Uyi-sensei mirando una lista que tenía en el escritorio.-Tú compañero será... ¡Yue!
-¿¡Que?!
No podía creer lo que acababa de oír, al instante, voltee a ver a Yue, este me miraba muy molesto. Al verlo, comencé a gritar de nuevo, como siempre hago cuando estoy enojado.
-¡De ninguna manera quiero ser compañero de él! ¡Ese sujeto es sumamente raro! Es frío, cruel, con aspecto tenebroso, y además le gusta ver sufrir a los demás. Estoy seguro que no sabe trabajar en equipo.
-No digas eso Akari-kun-. Por segunda vez, escuchaba la voz de Yue, al verlo, me sorprendió ver que me estaba sonriendo dulcemente.-Eres nuevo aquí, no debes decir todo eso de mi si no me conoces. Con sólo verte, puedo deducir que eres un chico valiente, listo y fuerte. Yo por mi parte, si quiero ser tu compañero... ¿Qué dices Akari-kun? Dame una oportunidad, te aseguro que no te arrepentirás.
-¿Qué le pasa a este sujeto? Se comporta diferente.
Pensé ¿En serio era el mismo Yue que ayer me jugo esa mala broma sólo para verme sufrir? Ahora él me sonreía, y me hablaba de manera amable. No entendía nada.
-Ah... ¿Akari-kun? Me dijo Uyi-sensei dudando, obviamente esperaba mi respuesta.
-Está bien, Uyi-sensei.
***
Las clases finalmente ya habían acabado, ni siquiera me moleste en ir a hablar con Yue, a fin de cuentas, éramos compañeros de equipo, y nos veríamos muy seguido. Seguía pensando en su comportamiento de la mañana, pero en fin, siendo así, tal vez no seria muy difícil llevarme bien con él.
Al abrir la puerta de mi habitación, me sorprendió ver a Yue dentro de ella, desempacando sus cosas, y acomodándolas en mi habitación.
-¿¡Que haces tú en mi cuarto?!
-Querrás decir nuestro cuarto.
Me dijo, mirándome, sin darle importancia al asunto.
-¿Cómo que nuestro?
-Como ahora somos compañeros de equipo, debemos compartir el cuarto... ¿Por qué crees que hay 2 camas? Como dicen los maestros, como somos compañeros debemos llevarnos bien, entendernos a la perfección, estar juntos todo el tiempo... ¡Son tonterías!
-Oye Yue... -Le hable más tranquilo-. ¿Por qué actuaste así en el salón de pociones? ¿Era cierto lo que dijiste? ¿Qué quieres ser mi compañero?
Delante de mí, escuche como Yue comenzó a reírse, fríamente y en voz alta. Una ves su risa se calmo, agrego.
-Por supuesto que no, no seas ingenuo
-Entonces... ¿Por qué?
Yue quien me estaba dando la espalda, finalmente se volteo, y me vio con esa misma sonrisa cruel del día anterior.
-Tú no querías ser mi compañero, así que como quería verte molesto y sufrir, te convencí.
Sentí como la ira lleno todo mi cuerpo, me concentre en su maleta, la cual reposaba en el suelo, y con mi magia la eleve por el aire, e hice que se moviera hasta la puerta.
-¡Oye tú! ¿¡Que haces con mis cosas?!
Yue hizo lo mismo, deteniendo mi hechizo, y ahora la maleta flotaba por el aire delante de nosotros, no cediendo a la voluntad de ninguno de los 2. Yo le hable a Yue, sumamente molesto, y dolido.
-¡No quiero a nadie tan odioso como tú en mi cuarto, ni como mi compañero!
Finalmente nos dimos por vencidos, y la maleta cayó al suelo, cerca de la puerta. Yue se acerco hasta ella para recogerla, contestándome también muy molesto.
-Yo tampoco, no quiero ser compañero de un gritón que parece chica
-¿Chica?-Dije sorprendido, de nuevo el tono de mi voz subió.- ¡Yo no parezco chica! ¿¡De donde sacas esa idea tan absurda?!
-Mírate tonto, eres muy bajo y delgado
-¡Eso no quiere decir nada!
Yue me miro con frialdad una vez más, y de nuevo se volteo y agacho para recoger sus cosas.
-Para el caso se que será lo mismo. Te cansaras de mi y pedirás otro compañero... siempre es igual.
Las últimas palabras que pronuncio las hizo en voz baja y débil, ya sin mostrar enojo. En ese momento me sentí muy triste por él, no lo admitía, pero estaba seguro que debía sentirse muy triste de que lo rechazaran. Después deje mi dureza a un lado, y le sonreí dulcemente.
-Descuida, yo no lo haré. No pediré otro compañero, no debes sentirte triste.
-No seas idiota, no me siento triste. Me da igual que me rechacen o no, tampoco quiero tu compasión.
Mi intento de ser amable con él se fue por el drenaje, y de nuevo me ataco la ira.
-¿Ah si? Los 2 no queremos ser compañeros por lo que... ¡2 podemos jugar el mismo juego! ¡Seré tú compañero, para molestarte y por que se que no te simpatizo!-Después agregué sonriéndole con maldad.-Y no importa que tan molesto seas... ¡no te cambiare!
Yue me miro muy sorprendido, después, él me sonrío de la misma manera.
-De acuerdo, veamos quien aguanta más. Pero de una vez te lo advierto, yo quiero graduarme y ser hechicero. Si eres un debilucho, ya veras...
-Yo también lo deseo, no me daré por vencido.
Ambos nos miramos en silencio, sonriéndonos, como quien mira a su rival.
Esa noche, me resulto mucho mas difícil dormir, de seguro fue por que ahora compartía la habitación con Yue.
*** 
A la mañana siguiente, me desperté al sentir un almohadazo en mi cara. Me levante asustado, y vi a Yue, parado frente a mi, con el uniforme puesto.
-Yue... ¿Qué pasa? ¿Por qué me despiertas así?
-Para decirte que faltan 5 minutos para las clases ¡y si no te apuras llegaremos tarde!
Me sorprendí al oír eso, y comencé a correr como un maniaco por toda la habitación.
-¿¡Que?! ¡Esto no puede ser!
-Sólo ponte el uniforme y vámonos
-Pero no he desayunado, y...
-¡No importa! Si llegamos tarde se nos descontaran puntos. Y como no llevamos ningún punto, si eso pasa, no nos permitirán tener duelos mágicos por un mes, y perderemos la oportunidad de ganar muchos puntos. ¡Apúrate!
No quise oír más, y me prepare a velocidad luz. Ambos salimos trotando de nuestra habitación, al salón de clases.
-Ahora escúchame Akari
-¿Qué quieres?
-Como ahora somos un equipo, necesitamos un líder, y yo lo seré. Deberás hacer todo lo que te diga...
-¡Jamás!
-¿Qué?
-No pienso acatar órdenes de un tipo como tú
-No seas testarudo y caprichoso
-Yo seguiré mis reglas, así que tú sigue las tuyas.
Continúe caminando rápidamente sin decirle nada, no pude saber en ese momento que Yue pensó que yo era especial, ya que no le temía como los demás, yo era el único que me había atrevido a alzarle la voz, y defenderme de su manera tan arrogante de ser.
Yo por mi parte, pensaba que Yue no era tan difícil de tratar, en ese momento pensé, que haría lo posible por llevarme bien con él.
Sin darnos cuenta, ambos sonreímos, ya que nuestra historia apenas empezaba, y no sabíamos todo lo que nos esperaba mas adelante.

+CONTINUARÁ+

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encanta este fic!! lo estoy leyendo en amor yaoi (soy adicta a esta página xD) y me he enganchado a tu historia, dentro de poco la terminare ^^
Por cierto, el dibujo de Akari te quedo genial!! Seguiras con el resto de personajes?? la verdad es que me gustaria verlos =D jeje
bueno, animo!! ^^

§ Neko_Yami § dijo...

Hola n.n
Bueno,me alegra que te guste el fic,y el dibujo de Akari no lo hice yo(bueno fuera xP)lo hizo mi mejor amiga.Pero solo tengo dibujos de Yue y Akari,pienso hacer las fichas de los demás personajes,pero sería sin dibujos U.U
Como sea,gracias por los ámimos :3